Entren to´...

República Dominicana sigue bailando, pero no mambo. Baila al ritmo de las brisas de las tormentas cuyas visitas son fijas año tras año.

Gustav ya pasó e hizo de las suyas: 8 muertos, más de 4,600 personas fuera de su hogar, viviendas desplomadas e inundaciones.

Tres más andan cerca, Hanna, Ike y Josephine, y República Dominicana les saluda en un estado de prevención y alerta cuestionable(la gente sigue viviendo en la orilla de los ríos, el sistema de desagüe es inapropiado y los dominicanos con la costumbre de arrojar basura a las calles y tapar los alcantarillados). Seguir Leyendo...

Habría que comparar la República Dominicana del año en que George visitó el país con la del año pasado que fue movida por las tormentas Olga y Noel y la de hoy, que baila con el viento y la lluvia de las tormentas tropicales Hanna, Ike y Josephine. Así se evaluaría cuánto se ha avanzado y qué tan seguros están los dominicanos a la hora recibir estos fenómenos atmosféricos.

Estas tormentas y huracanes además de hacer un “boquete” en la economía nacional, abren paso a enfermedades como la leptospirosis, un nuevo mal, transmitido únicamente por los huracanes y tormentas que llegaron al país para destruir y consumir los recursos que subsidian el desarrollo nacional.

Es que si al momento de enfrentar estos fenómenos, las autoridades dominicanas encargadas de prevenir al pueblo, siguen diciéndole a los vientos y lluvias entren to’…
El futuro del país seguirá siempre en riesgo.